STV cuida el bosque urbano con criterios de poda respetuosos y sostenibles

Durante años, el invierno ha sido sinónimo de poda del arbolado de todo tipo. Hemos visto cómo en pueblos y ciudades se han realizado podas severas del bosque urbano, tal y como ahora vemos que en muchos lugares ya no se apuesta por este tipo de trabajos. ¿Por qué? La razón es sencilla, ya que se apuesta por cuidar los árboles para que sean más seguros, se ajusten a las limitaciones que tienen por el simple hecho de estar en las ciudades, y aporten los muchos beneficios que nos dan a las personas. Además, los trabajos de poda se realizan cuando son necesarios para cada especie.

El departamento de Áreas Verdes de STV Gestión aplica criterios de poda más respetuosos y sostenibles en aquellos lugares en los que trabaja. Y para resolver las dudas que se plantean desde la ciudadanía, que en muchas ocasiones se pregunta por qué antes se podaban los árboles (poda severa) y ahora no (poda naturalizada), también hemos creado campañas de divulgación de esos nuevos criterios de poda que recomienda la Sociedad Española de Arboricultura.

En la ciudad de Alicante y junto con el departamento municipal de Zonas Verdes, hemos desarrollado la campaña ‘Por una poda con cabeza’. En ella se explica, de manera muy visual, cuándo y por qué se poda el bosque urbano por parte del servicio Brota Alicante que presta STV Gestión.

Efectos negativos de las podas severas

  • Inanición: La retirada de ramas, en especial de la copa, reduce la capacidad del árbol para elaborar su alimento.
  • Shock: Al eliminar parte de la cubierta protectora de la copa, el árbol queda expuesto al sol y puede quemarse.
  • Insectos y enfermedades: Insectos y hongos pueden invadir con más facilidad los extremos de las ramas que quedan expuestos.
  • Debilidad: Las ramas que crecen para intentar sustituir las podadas tienden más a romperse.
  • Rápido crecimiento nuevo: La poda en recorte causa el efecto contrario al que se busca, ya que las ramas nuevas son más numerosas y crecen más alto.
  • Muerte del árbol: Algunas especies no soportan la pérdida de sus ramas principales. Si sobreviven, quedan debilitados y son propensos a enfermedades.
  • Estética: Un árbol desmochado es un árbol desfigurado.
  • Sobrecoste: El gasto en podas es más continuado, y el reemplazo del árbol cuando muere supone un gasto innecesario de haberlo cuidado con anterioridad.
  • Soporte: La poda severa debilita el sistema radicular, lo que supone que haya peligro de caída.

Beneficios de la poda naturalizada adaptada al entorno

El bosque urbano aporta beneficios a las personas y al medio ambiente al tiempo que hacen las ciudades más habitables.

  • Aumento de la biodiversidad: Otras plantas, polinizadores, aves… Utilizan los árboles como espacios para vivir, alimentarse y protegerse.
  • Minimizan los efectos del cambio climático: Un árbol absorbe hasta 150 kilos de CO2 al año, así como las partículas contaminantes que se generan en las ciudades.
  • Mejoran la habitabilidad: Amortiguan el ruido, rebajan la temperatura, retienen el agua, nos protegen del sol y la lluvia.

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